LO BELLO Y LO TRISTE. YASUNARI
KAWABATA
Me gustaría comentar muchos
aspectos de este libro. En principio, me ha encantado la forma en que está
escrito. En unas doscientas páginas, Yasumari Kawabata, primer japonés al que
se le concedió el Premio Nobel de Literatura (1968), crea en lo que sería su
última novela, Lo bello y lo triste
(1965), un argumento potente que va desarrollando de una manera hermosa. Con
una habilidad especial nos muestra el interior humano, en la psicología de los
personajes. Con sencillez y naturalidad va introduciéndonos en las situaciones
y los hechos que plantea en la novela.
Los diálogos son también un acierto; tienen una gran importancia, pues
con ellos no hace falta narrar acontecimientos, ya que directamente abordan
cuestiones de los personajes y del argumento.
En la trama, el pasado nos va llegando a la vez con la acción del
presente, en el que se recuerda y se habla de él, y es la consecuencia de ese
pasado dramático, que arrastran los personajes y que no lo olvidan. Por eso, en
la novela hay temas con mucha fuerza: dolor, pasión, venganza, celos… y se expresan sentimientos muy intensos. Pero
este libro tiene las dos caras, lo bello y lo triste, como dice su propio
título, una dualidad real de la vida. Lo hermoso y lo trágico, el amor y el
odio, la juventud y la vejez… a veces, ni siquiera como extrema dualidad sino
exponiendo las diferencias y variaciones de visión y de situación. Por una
parte, el amor, la ternura, la sensualidad, el erotismo, la belleza personal y
la de la naturaleza. Ésta se encuentra muy presente en toda la narración y la
describe de una forma preciosa y magistral, que llega a los sentidos y conecta
con los estados de ánimo. Además, va intercalando monumentos, lugares,
costumbres, festividades, rituales y pequeñas historias de la cultura japonesa.
Todo esto contribuye a restar dolor y dramatismo a la otra parte: la tristeza
de los hechos que se narran.
En cuanto a los personajes, no
son personajes planos, incluso sus dualidades, a mi manera de ver, los hacen
más reales, porque podemos ser “buenos” y “malos” en nuestro comportamiento, en
el presente y a lo largo de nuestra vida. El protagonista es un hombre, Oki,
pero son las mujeres (Otoko, Keiko y Fumiko) las verdaderas protagonistas,
porque Kawabata ha expresado con ellas la complejidad del comportamiento humano
y lo que podemos llegar a hacer. Estas mujeres son personajes llenos, complejos
y atrayentes, bien trazados y elaborados por el autor.
En la novela, son muchas las
reflexiones directas o indirectas. En relación al tiempo, hay frases muy
interesantes que nos hacen detenernos y pensar, como: “El tiempo y los ríos no
corren para atrás”, “Tratar de asir la ocasión cuando ya pasó” o “El tiempo
cósmico es igual para todos, pero el tiempo humano difiere con cada persona”.
También se le da mucha importancia a los recuerdos, como momentos claves de
nuestra vida que nos acompañan siempre y a los que les damos mucho valor. A
veces, un simple olor, un determinado color, una expresión… nos trae recuerdos
a nuestra mente. Su complejidad hace que
según pensemos en ellos, así lo sentiremos y así le daremos vida, actuando en
consecuencia.
Otra de las cuestiones a
comentar sería todo lo que aparece en la novela sobre el arte: la pintura y la
escritura. Otoko y su discípula, Keiko, son pintoras. Oki, es escritor y su
mujer es quien le pasa a máquina los manuscritos. Se habla de cuadros y libros,
de los procesos de la pintura y de la escritura, de las experiencias personales
a la hora de pintar y, sobre todo, al escribir. Estas reflexiones son cruciales
en la narración: utilizar lo personal como tema de escritura, ya que Oki
publica una novela sobre un episodio de su propia vida.
En mi opinión es un buen
libro, moderno por cómo trata la relación afectiva entre dos mujeres, con un
planteamiento duro y difícil pero real. Bien tratado y escrito con gran
sensibilidad, lirismo y elegancia. Los diálogos tan directos y los personajes,
me han recordado a Tokio Blues de
Haruki Murakami, por lo que Kawabata es un escritor que ha marcado a la
literatura japonesa.
El final de la novela me ha
dejado con preguntas y con muchas ganas de comentarlo con otras personas para
conocer sus opiniones. Lo bello y lo triste
es uno de los libros que estamos leyendo en los clubes de lectura de la
biblioteca y aunque seguimos en contacto enviando nuestros comentarios por
correo electrónico y whatsApp, se echan de menos las reuniones y el poder
compartir y discutir las diferentes interpretaciones de nuestras lecturas. Todo
volverá.
Comentarios
Publicar un comentario